REGALO DE NAVIDAD

El chabón es uno de esos que me escriben una y otra vez y nunca concretan, diciéndome que no se animan, porque sería la primera vez con un trolo. Esta vez arranca de la misma manera, me pregunta los detalles de la sesión y yo ya ni me gasto, busco en el archivo el mismo audio que le mandé hace unos meses y se lo reenvío, esperando que con eso le baste para hacerse una paja solitaria, como debe haber hecho las otras veces. Pero esta vez se manda y me pide pasar en cinco minutos, un arrebatado el loco. Le digo que lo puedo recibir recién en una hora y él espera una hora dando vueltas por el barrio, que no es precisamente el más amable para ponerse a pasear. Cuando se acuesta en la camilla, está temblando de nervios y las manos le transpiran, ahí entiendo que sí, es absolutamente cierto, es la primera vez que va a tener un encuentro con un puto. Le toco las manos, le acaricio la piel para que se tranquilice, y se le empieza a parar la pija. Qué manos suaves tenés, me dice. Yo no tengo manos suaves, tengo manos ásperas, de trolo curtido por el trabajo, pero mi toque es el que es suave, así que no le digo nada y sigo. En cuanto se tranquiliza se le baja la pija. Es una erección provocada por la angustia. La angustia es una especie de excitación. Los masoquistas lo saben muy bien, cómo se llamaba el cantante de INXS que se mató ahorcándose para que se le parara la pija? Ése también lo sabía. Le hago el masaje bien, completo, el chabón necesita relajarse. Le da por hablarme, debe ser por los nervios también. Pero hasta por los codos habla. Me comenta con asombro cada toque que le hago a los músculos. Es la primera vez que le hacen un masaje en todo el cuerpo también, dice que hasta ahora siempre se los habían hecho en la espalda nada más. El chabón supo de mí porque encontró uno de mis videos en una página porno, y mi teléfono figuraba en alguno de los mensajes y desde entonces que me tenía agendado. Asumo que se debía haber hecho un par de pajas con mis petes, porque, básicamente, esos videos son de clientes que me graban mientras les como la pija, pero él no quiere que se la chupe, cuando llega el momento, casi que no quiere que le haga ningún final feliz. Yo, que estoy sentado delante de su pija, y ya se estaba empezando a tocar, al instante la suelto y le digo, bueno, eso es decisión tuya, quizás lo mejor sea que te vayas así, con el masaje sólo también vas a estar bien. Cambia de idea al instante, bueno, pero si la seguís tocando así un rato está bien. Así que se la sigo tocando, se le termina de parar al toque, como el chabón ya está relajado y en confianza, la carne eréctil responde bien a los golpecitos y masajes que le hago a lo largo del tronco, a los costados del canal de la uretra. El tipo se queda con la cara petrificada en una cara de gozo, con la boca fruncida en círculo. La está pasando bien, le toco los sitios correctos. Cuando llego arriba hasta el repliege del frenillo debajo del glande, exclama, sí sí, es ahí, ahí. Me quedo haciéndole pequeños círculos ahí, sin levantar la yema del dedo, siempre en contacto con el punto sensible. No quiere que le ponga aceite, así que espero que supure un poco de presemen para lubricarlo y moverlo un poco más. Y ahí el tipo es como que enloquece de ansiedad y se quiere agarrar la pija y terminarse él sólo. Él me dice que le haga una serie de golpeteos rápidos en el tronco de la chota, pero está demasiado ansioso y tengo que luchar con sus manos que quieren ir a hacerse la paja. Es como que el chabón, de golpe, está poseído por un demonio de la paja, intuyo que esa es su principal manera de tener sexo, la paja. Pero el forcejeo tiene su gracia, su buen humor, y, como él quería golpes, yo termino dándole un par de cachetazos a la pija, que lo hacen incorporarse a las carcajadas. Se caga de risa. Y al reírse se le baja la pija. Quiere volver a parársela, sacudiéndola a lo bruto con la mano. Yo lo vuelvo a frenar. Pará pará, no ves que ya bajó? Pero tengo que acabar! Me dice, ansioso. Y ahí, no sé por qué, me pongo en evangelizador tántrico y le digo, no hace falta que acabes, podés usar esa energía de otra manera. Recostate, le pido. Y le pongo una mano en los huevos y otra en el pecho. La energía que nace acá, en los huevos, como deseo sexual, es la misma que se manifiesta acá, en el pecho, como amor. Es como la temperatura, están el frío y el calor, que parecen diferentes, y hasta opuestos, pero que son manifestaciones de una misma cosa, la temperatura. Lo mismo es con esto. Ahora tratá de emitir amor desde tu pecho, pensá en alguien que quieras y a quien le haga falta que le envíes tu amor. Ahí agarré un cuenco de esos que producen notas musicales constantes y lo empecé a tocar, para ayudarlo a concentrarse. Bajá la respiración, pensá en esa persona y mandale tu amor, le repetí. Y nos quedamos así unos minutos. Cuando terminamos, el chabón no lo podía creer, ya no tengo necesidad de acabar! cómo puede ser? El tipo estaba sorprendido en serio. Hace unos minutos era en lo único que podía pensar, ahora ya no quiero hacerlo, es como si las ganas se me hubieran evaporado! Viste? Le digo: es que en vez de sacarlo por la pija, lo sacaste por el pecho, convertido en amor. Y no importa si esa persona a la que lo enviaste lo recibió o no. Sí, sí, lo recibió, estoy seguro, me dijo él con fervor. Yo creo, yo tengo fe. Sí, yo también creo y tengo fé, pero es incomprobable, por eso es una cuestión de fé, pero lo que sí es cierto y comprobable es que vos, después de hacerlo te sentís mejor, de cuerpo y mente, que si hubieras acabado por la pija. Eso sí que es directamente comprobable, no hace falta ningún acto de fe para creerlo, es directamente percibirlo. Es el tantra, che. Qué loco! El chabón estaba flasheándolo. Y esto lo puede hacer cualquiera, o es solamente para gente que tenga alguna predisposición. Cualquiera puede hacerlo, es una técnica, le digo. Y ahí me quedé pensando en si habría hecho bien en enseñársela, es muy sencilla, pero dudo que el chico éste hubiera llegado a ella si no yo no se la hubiero impuesto de súbito en una sesión de masajes eróticos en Constitución, quizás afecté el camino de una vida de una manera que no estaba destinada a ser así, quizás utilizara esa reserva de energía que le estaba dando para hacer cosas que no debiera hacer, cosas malas, pero no, se lo enseñé mediante la utilización del amor, no debiera por qué ser de otra manera, si la utilizara de otra manera, como, no sé, digamos, llegar a presidente de una nación y empezar a hacer cagadas, ya no sería enteramente mi responsibilidad. Sea como fuera, ya lo había hecho, que quedara como mi regalo de navidad a este pobre tipo que no se animaba a que un puto le chupara la pija. Él, por su parte, habían ya pasado varias horas y me lo seguía agradeciendo por whatsapp.

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

La cola abierta

Una pija demasiado grande

Joven tan joven que es dominante sin saberlo