Con el culo roto

Ayer me dieron tan fuerte por el culo que quede todo roto, asi que hoy decidi no entregar la cola por un par de dias, para dejarlo descansar un toque. A un par que llamaron y que les explique la situacion, no les cabio nada y cancelaron hasta la semana proxima. Y yo me quede con sentimientos encontrados, porque por un lado quiero descansar mi culito y por el otro me pone mal no estar a la altura de lo que los hombres quieren de mi. Me puede la vocacion de servir y me siento traicionado por mi cuerpo. Y eso que no disfruto especialmente entregando el orto. Lo que disfruto es entregandome al varon y que el varon disponga de mi cuerpo para su placer. Es el placer del varon lo que me a mi me causa placer. Un placer reflejo.

Finalmente llamo uno que si acepto las condiciones de no anal. Un tipo de seguridad que trabaja por aca cerca y que tenia los pies rotos por usar todo el dia esos tremendos borcegos. Heterosexual joven, primera vez con un..., y no quiere seguir con la frase "sin ofender" me dice. "Primera vez con un puto. La verdad no ofende" le contesto. Algo muy de hetero primerizo es que no le cabe que me saque la ropa, asi que me tengo que dejar la remera y el boxer, con el calor que hace. Pero todo bien, trato de complacerlo y de que se sienta comodo. Hasta que le caiga la ficha de que no soy ninguna amenaza a su virilidad. Igual me dice que no quiere sexo, que viene solo por el masaje, como que se asusta de cuan lejos llego. Asi que tranqui. "Haceme el masaje tranquilo"

El no se saca ni las medias ni el slip. Las medias se las saco yo porque no puedo masajearle los pies con medias, el se ataja: "después de toda la maniana con los borcegos eso es una bomba atomica". No es cierto, no huelen mal. Asi que me pongo a trabajar en los pies y a darle charla relajada. Una charla relajada induce al relax tambien. Las charlas sobre nuestros quehaceres cotidianos lleva a que le cuente toda la situacion de como me rompieron el ojete ayer y de como es que los varones no quieren tanto el ojete como que les trabaje la pija con ellos tranquis y otras situaciones de mi vida dia a dia. Como la cantidad de pijas que me como por semana y algunas actitudes de los varones conmigo. Banalidades. Y la pija del tipo noto que se le para cada vez mas dentro del slip. "Te la re puse con mis historias", le digo. "Es que me parece que estas tocando zonas erogenas en los pies", me aclara el.

"Ahora me podes hacer las muslos aca arriba?" se anima, finalmente. "Bueno, pero para eso sacate el slip. Que te lo voy a manchar". Ahi ya se la habia vuelto a bajar la ereccion, pero me dice que tenga cuidado porque si le empiezo a tocar las piernas y se le para "no hay vuelta atrás". Tiene lindas piernas, muy musculosas. Es como si los musculos fueran a estallar debajo de la piel de tan desarrollados que los tiene. Y claro, la pija se le para. Yo le bajo el prepucio, como si nada, y seguimos charlando de todo un poco. Desacralizando la situacion, que lo viva como algo normal. Asi que se le vuelve a bajar. Pero cuando termino con las piernas, interrumpo un poco la charla para metermela en la boca. Ahi ya se le habia bajado, porque habiamos vuelto a hablar de cualquier cosa. Diluyendo la onda sexual. Medio que lo sorprendi, porque estaba haciendome una pregunta cualquiera cuando yo, asi muy tarnqui, me incline y me la meti muy pancho en la boca. Estaba chiquita y blanda, pero no se, me habra tomado un minuto y media en tenerla toda hinchada y dura entre la garganta y el paladar.

Estoy unos minutos dandole lengua y garganta a la chota. Hasta que me pide que la saque de la boca. "Que pasa, vas a acabar?" le pregunto yo. "Es que tengo unas ganas de garchar!" me dice el. Y yo me excuso otra vez, desolado. "No, hoy no puedo, la verdad. Me va a hacer re mal". Y el pide entonces apoyarme un poco nada más. "Bueno, dale. Pero no entres por favor. Queres que me ponga una tanga, algo?". Pero no hace falta, me pide que me acueste boca abajo y se conforma con frotarme la pija dura por encima del boxer y luego se vuelve a acostar boca arriba. Prefiere no acabar. Asi que me quedo masajeandole los pies un buen rato mientras seguimos charlando de la vida y el puede contarme todos sus problemas familiares, con su ex, con sus hijos, con sus viejos, toda la situacion familiar, todo el stress. Yo le digo que si uno no puede relajar, bajar un cambio y quedarse un buen rato despreocupado de todo, la vida no vale la pena vivirla. El hombre no fue creado para estar todo el tiempo en alerta. El hombre desciende del mono, que se pasaba las tardes mirando las nubes panza arriba en el pasto y solo de tanto en tanto tenia que correr de los predadores que lo acechaban. Y que estar conmigo era un poco estar asi, hablando pavadas un buen rato, con un puto dulce que te masajea los pies y que de tanto en tanto se la mete en la boca.

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